Que el aire del tiempo recobre tu cielo.
Envuelta en silencio de tibios recuerdos.
Anido en tu alma en rocío eterno.
De besos dados.
De agua en desierto.
Da el salto donde nos encontremos.
Fundidos en carne.
Bebidos en secretos.
De dos en uno.
De uno en cientos.
Somos infinitos en este preciso universo.
Te amo exquisitamente, latiendo intenso.
. . .
EL DEMONIO Y EL ÁNGEL...
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*Un demonio seductor,*
*nos va inyectando su orgullo,*
*sus dudas y cobardía;*
*él cuida de nuestro ego*
*con cautela y osadía.*
*Su lógica realista,*
*con...
Hace 1 día
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