Dame el aire de tu cuerpo.
Te envuelvo perfecto
en besos de cielo,
en suspiros eternos,
que en los huesos te llevo perpetuo.
En el jardín del silencio nos recostaremos,
en abrazo del agua culminaremos,
dándonos sorbos del fuego bueno.
Solo ocurre que en ti me quedo.
Vuelve a mis ojos.
Lo sabes, lo sientes.
Te amo infinitamente bello.
. . .
EL DEMONIO Y EL ÁNGEL...
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*Un demonio seductor,*
*nos va inyectando su orgullo,*
*sus dudas y cobardía;*
*él cuida de nuestro ego*
*con cautela y osadía.*
*Su lógica realista,*
*con...
Hace 1 día
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